Guía para Institucionalizar a un Adulto Mayor: Por Qué la Orientación Profesional es Esencial

Hay matices en el cuidado geriátrico que incluso las familias con las mejores intenciones suelen pasar por alto, especialmente si la institucionalización debe preceder a la orientación profesional.

Institucionalizar a un adulto mayor nunca debe ser una decisión apresurada. Más que un cambio de residencia, es una transición que afecta su salud física, emocional y social. La integralidad de los cuidados geriátricos —que incluye atención médica, psicológica, nutricional, social y espiritual— es el estándar mínimo que todo hogar geriátrico debe garantizar. Sin embargo, solo el 38% de las familias en Colombia reciben orientación profesional antes de tomar esta decisión (Asociación Colombiana de Geriatría, 2024). En este artículo, te explicamos por qué esa asesoría no es un lujo, sino una necesidad, y cómo evitar errores comunes que pueden afectar la calidad de vida de tu ser querido.


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¿Qué significa “integralidad” en los cuidados geriátricos?

La integralidad va más allá de “dar comida y techo”. Se refiere a un enfoque holístico que atiende las 5 dimensiones del adulto mayor:

1. Atención médica continua

  • Evaluación geriátrica integral (EGI) al ingreso.
  • Manejo de enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, demencia).
  • Protocolos de emergencia y prevención de caídas.

2. Bienestar emocional y psicológico

  • Acceso a psicólogos gerontólogos.
  • Actividades que fomentan la autoestima y el sentido de propósito.
  • Prevención de la depresión y el aislamiento.

3. Nutrición personalizada

  • Menús adaptados a condiciones médicas.
  • Supervisión de ingesta y peso.
  • Apoyo en trastornos de deglución.

4. Vida social y estimulación cognitiva

  • Talleres, salidas, celebraciones.
  • Programas para personas con deterioro cognitivo.
  • Espacios seguros para la interacción.

5. Respeto a la dignidad y autonomía

  • Enfoque en “cuidar con dignidad”, no solo “vigilar”.
  • Participación en decisiones (cuando es posible).
  • Privacidad y rutinas personalizadas.

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¿Por qué necesitas orientación profesional antes de elegir un hogar?

Muchas familias eligen basadas en ubicación o precio, ignorando factores críticos como:

  • Capacidad del personal: ¿Hay enfermeros 24/7? ¿Están certificados en geriatría?
  • Modelo de cuidado: ¿Es asistencial o promueve la autonomía?
  • Transparencia en contratos: ¿Qué cubre la mensualidad? ¿Hay cláusulas ocultas?

Una asesoría especializada te ayuda a:

  • Comparar opciones reales (no solo las que aparecen en Google).
  • Entender los niveles de dependencia de tu familiar (bajo, medio, alto).
  • Negociar condiciones justas y evitar sobreendeudamiento.

Checklist: 4 preguntas que debes hacer antes de firmar

  1. ¿Puedo visitar sin previo aviso? (Transparencia real)
  2. ¿Cuál es la relación personal/residente? (Ideal: 1:5 en adultos dependientes)
  3. ¿Tienen protocolo para emergencias médicas?
  4. ¿Cómo manejan los conflictos conductuales? (Ej: agitación en demencia)

¿Necesitas asesoría y tomar la mejor decisión para el bienestar tu persona mayor?

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